Como ya hemos comentado en otros artículos, la autoestima tiene múltiples factores por los cuales se forja más alta o más baja. Si en este momento sientes que tienes la autoestima por los suelos, te invito a hacerte estas 5 preguntas:
¿Qué está pasando en distintas facetas de mi vida?
La sensación de autoestima baja o por los suelos no es casualidad; se enmarca en una serie de contextos concretos, junto a personas y actividades concretas. Es imprescindible que reflexiones en este momento: ¿En qué áreas te sientes así? ¿En tu trabajo? ¿Con tu aspecto? ¿Con la pareja? ¿Con tus amigos? ¿A solas? Identifica en qué contextos te sientes especialmente afectado/a e intenta como si fueras un observador “desde fuera de tu propia vida”. Pero trata de observar el cuadro completo: revisa cómo están cada una de las áreas más relevantes de tu vida, así te será más fácil identificar las fuentes del malestar.
¿En qué facetas me siento especialmente mal o con “la autoestima por los suelos”?
Una vez hayas hecho una inspección por esas áreas vitales (pareja, trabajo, familia, amigos, ocio, formación…) analiza cuáles de ellas te hacen sentir especialmente mal. ¿Es cuando empiezas a hacer una nueva tarea en tu trabajo que no te sale bien? ¿Es cuando tu jefe te regaña por hacerlo mal? ¿Es tu madre cuando te llaman para abroncarte? ¿Es tu pareja cuando te compara con otras? ¿Es un problema de salud? Identifica cuáles son las que especialmente te influyen en sentir tu autoestima baja. Por otra parte, no solo habrás de inspeccionar los contextos presentes; también echa un ojo por tu historia de vida, que seguramente tenga alguna relación con algo que ahora te afecta.
¿Qué personas y/o experiencias me están haciendo sentir «baja autoestima»?
Las personas somos un producto de nuestra experiencia social; ella nos construye, nos forja y nos esculpe. Nos conocemos a través de los otros, tanto para bien como para mal. A veces sin darnos cuenta, empezamos a acomplejarnos de cómo hacemos desde un plato de comida, hasta nuestra cara. Esto no es casualidad. Normalmente hay un emparejamiento de lo que hacemos y nuestro aspecto con emociones agradables y desagradables. ¿Y una vez más esto de qué depende? De las experiencias sociales que tengas asociadas a esas cosas. Si tienes personas en tu alrededor que han castigado o castigan cosas que ahora “te hacen sentir con la autoestima baja”, mira por qué se te dice o te se te hace sentir así, cuánto de verdad y cuánto de manipulación pudiera haber en esas palabras.
¿Con qué elementos de mi historia de vida puedo relacionar lo que me pasa?
Como ya hemos comentado, las emociones no son por libre albedrío. Las emociones están asociadas a otros elementos de nuestra vida. Revisa si esas cosas que ya sabes que están doliendo de esos contextos previos, están asociados a experiencias de tu vida, y el cómo te han afectado en tu historia. Así mismo, revisa qué cosas hiciste entonces, qué cosas haces ahora, y siguen siendo las mismas, pues puede ser, que estén perpetuando este problema en una parte.
¿Qué he hecho hasta ahora para intentar solucionar “mi autoestima baja”?
Y relacionándolo con el punto anterior, es posible que algunas de las cosas que hayas hecho para “solucionar tu baja autoestima” sean conductas como: justificarte ante otros o ser demasiado cortante, dejar de hacer cosas valiosas para ti por el malestar, embacartarte en tareas satisfactorias solo a corto plazo pero de escaso valor para el cambio, criticar, quejarte (o no quejarte cuando deberías), callarte (o hablar demasiado), no probar contextos nuevos o cambiar constantemente como mecanismo de evitación… Cada situación particular habrá forjado en ti diferentes conductas evitativas que tal vez están perpetuando sin que te des cuenta, tu sensación de baja autoestima.
Si te cuesta identificar todo esto, estaré encantada de ayudarte: hola@lauragares.com
Un fuerte abrazo,